Las posibilidades de las consolas de Nintendo en ocasiones abrazan horizontes totalmente inesperados. En la época de los 16 y los 32 bits, cuando la Gran N se colaba en nuestros bolsillos con Game Boy y Game Boy Advance, algunas compañías utilizaban estas consolas portátiles para fines totalmente alejados al videojuego. ¿Sabíais que Peugeot usaba las consolas Game Boy de Nintendo para hacer pruebas en sus coches y motos?

No era el único fabricante que lo hacía. Aprilia y Suzuki usaban, junto con Peugeot, lo que se conoce como Diag Kit de Nintendo. Dependiendo del año, este conjunto de herramientas incluía una Game Boy Color o una Game Boy Advance que, mediante un cartucho especial con varios puertos, se conectaban por cable a la centralita del vehículo para brindar información sobre la velocidad del motor, aceleración, temperaturas e incluso comprobar el funcionamiento de inyectores, bombas y mucho más. Las portátiles eran unas herramientas de diagnóstico perfectas. De hecho, en el vídeo que dejamos más abajo podéis ver cómo funcionan en este modo especial.

Orbital es la empresa que diseñó estos cartuchos de diagnóstico que se usaban en las consolas. Además de esto, la compañía desarrolló un sistema que permitía actualizar los cartuchos con nuevas versiones a través de internet, conectando la consola al PC mediante un cable especial. ¿Y por qué estas consolas y no dispositivos especializados? En realidad, cualquier taller que comprara la solución de Orbital solo necesitaba buscar una Game Boy barata para poder trabajar con los vehículos de la marca, sin necesidad de pagar las grandes sumas de dinero que costarían equipos especiales.

Aquí podéis ver un caso de uso con una Game Boy Color diagnosticando una moto Aprilia SR50. ¡Vais a alucinar!

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