Imagina ser Rocío Osorno, el videojuego: Análisis de Fashion Dreamer
El espíritu de Style Boutique llega a Nintendo Switch con Fashion Dreamer y en nuestro análisis te contamos si es el sucesor que esperábamos.
Han pasado seis años, pero por fin Syn Sophia se ha animado a traer un juego de moda a Nintendo Switch. Los creadores de Style Boutique y New Style Boutique vuelven a la carga con un título que parece el sueño de cualquier aspirante a influencer de moda. ¿Lo consigue? ¿Logra superar a todos aquellos juegos que llegaron en Nintendo DS y 3DS? Te lo contamos en nuestro análisis de Fashion Dreamer para Nintendo Switch. O, como nos gusta llamarlo, Imagina Ser Rocío Osorno, el juego.
Eve: el mundo de las Musas de la moda
Dicen que a veces es mejor ir al grano, y Fashion Dreamer no se corta un pelo en ese sentido. Tras aterrizar en el mundo de Eve, lo primero que tienes que hacer es crear una Musa que será tu avatar, con la opción de crear hasta cuatro distintas con cuerpo masculino o femenino.
Una vez tienes a tu personaje listo para empezar a crear tendencias, llegas a tu primer Nido, uno de los varios mundos tematizados que hay en Eve, dividido en tres zonas principales de las que hablaremos más adelante. Ahí, tras unos cuantos tutoriales, el juego te deja bien claro que tu objetivo es convertirte en influencer de moda y preparar Lookitos a otras Musas en base a sus preferencias.
¿Y algo más? En realidad, no. Fashion Dreamer es una especie de red social de moda, y no tiene ninguna pretensión de ser más que eso. Tu objetivo en él es convertirte en influencer de moda, diseñar (de forma bastante limitada) prendas de ropa, vestir a los demás y subir de nivel para acceder a otros Nidos en los que repetir lo mismo una y otra vez. No hay una historia, no hay personajes clave, no hay un aliciente adicional. Una lástima, porque Style Boutique sí se atrevía a eso, y pertenecía al mismo estudio.
De hecho, quizá por querer dar facilidades, o por esa inmediatez que se persigue tanto en los tiempos que corren, la sensación de progresión en Fashion Dreamer no resulta palpable. Prácticamente puedes conseguir las prendas que desees desde el primer momento, su único precio es un “Like”.
A Switch le queda divino
Siendo un título en el que la apariencia lo es todo, Fashion Dreamer apuesta por un estilo gráfico muy característico. Hay una clarísima inspiración manganime en el aspecto de las Musas, con una ligera tendencia al realismo, pero también un gran amor por el detalle que se distingue a la perfección a la hora de examinar las prendas.
Syn Sophia ha optado por una dirección artística muy acertada, que sabe combinar los colores con las formas para reflejar muy bien los diferentes estilos de cada Nido, pero que a su vez da libertad total para hacer que hasta los looks más estrafalarios resulten agradables a la vista.
Los contrastes de colores, las formas sencillas de su interfaz, las animaciones de los personajes… Lo cierto es que todo encaja muy bien y hace que el conjunto sea muy resultón sin que se pierda el enfoque en lo importante: la ropa. No es un portento técnico, ni necesita serlo. Se mueve con total suavidad, sin caídas que hayamos podido notar, y con una resolución muy nítida incluso en portátil. Desde luego, Fashion Dreamer viste a la perfección en Nintendo Switch. Aunque su banda sonora flojea bastante a pesar de reflejar con acierto la ambientación de los diferentes Nidos.
Entre Lookito y Lookito, hay que hacer poquito
Como ya hemos explicado, tu meta en Fashion Dreamer es crecer como influencer de moda en este pequeño mundo virtual, y para eso lo que debes hacer es ampliar tu colección de prendas, personalizar diseños y vestir a las otras Musas. Par esto, el juego elimina toda posible barrera, permitiéndote conseguir prendas con solo dar un “Me Gusta” a las que ves puestas en otras Musas o en expositores (también puedes conseguirlas con un Bingo o con un Gatcha, junto a mobiliario para tu showroom, patrones o paletas de color). Sí, en poco tiempo puedes tener una colección enorme de ropa con la que vestirte, o con la que jugar para vestir a los demás.
El bucle de juego es sencillo: tienes que contentar a las Musas de cada Nido haciéndoles los looks que te piden, acordes a las tendencias del Nido en cuestión. Haciendo esto, obtienes más “Likes” y puntos con los que subes de nivel como influencer y, además, desbloqueas el acceso a otros Nidos y algunas otras mecánicas, como el diseño de tus propias prendas o incluso de tu showroom, con muebles que desbloqueas subiendo tu marca de nivel.
Pero hay ciertos problemas. El primero es que, al diseñar los looks para las Musas, basta con encajar en la tendencia que le gusta o el requisito que te pide. Aunque la combinación sea un auténtico desastre (¡¿combinar rayas con cuadros?!), le gustará. Por otra parte, al diseñar las prendas, en realidad solo puedes alterar los patrones de prendas que desbloqueas, cambiando sus colores con las paletas que obtienes ayudando a Musas. Algo sorprendentemente limitado.
Online, el complemento imprescindible para este outfit
Ya lo decíamos antes en este análisis de Fashion Dreamer, es una especie de red social de moda para Nintendo Switch. Por eso, sería inconcebible que Syn Sophia no hubiera integrado una función online en este título. Está ahí y, de hecho, le queda como anillo al dedo, porque hace que la presencia de Musas se dispare en el juego. ¿Cuál es la diferencia? Que estos nuevos personajes a los que vestir son otros jugadores. Todas las mecánicas disponibles offline se trasladan al modo de juego en línea.
Eso significa que puedes mejorar tu afinidad con los demás interactuando con ellos, haciéndote fotos como harías con las Musas NPC, seguiros mutuamente para estar al tanto de las prendas que diseñáis, visitar sus showrooms o que visiten el tuyo. Potencia las posibilidades del juego ofreciendo muchos más personajes con los que interactuar, aunque al final haces exactamente lo mismo. Eso sí, el subidón de ver cómo una prenda que has diseñado se viraliza y empiezas a recibir decenas de “Me Gusta” en todo el mundo es un buen chute de serotonina.
Muy “fashion” y poco “dreamer”
Nos quedamos con eso último porque, al final, es la auténtica clave de este juego. El espíritu de New Style Boutique se ha trasladado a este juego de Switch para hacer de Fashion Dreamer una especie de “simulador de influencer de moda”, algo así como un “Imagina Ser Rocío Osorno“. Hace un enorme despliegue de prendas desde el primer minuto y su progresión se limita a llegar a nuevos Nidos y desbloquear más ropa, más patrones, más colores, más y más. Todo en la carrera por aumentar tu popularidad en Eve y, si juegas online, en el mundo real.
El sentido del propósito se diluye un poco al no haber metas tangibles más allá de los Me Gusta o el nivel de tu marca. No hay una historia en la que progresar, personajes importantes con los que interactuar más allá de las Musas. En ese sentido, se han dado pasos atrás respecto a lo que se pudo ver tanto en Nintendo DS como en Nintendo 3DS. Por suerte, hay actualizaciones gratuitas en camino con nuevos eventos y modos de juego, así que no todo está escrito. Mientras tanto, Fashion Dreamer lleva un Lookito que no hace justicia a sus telas. Tiene una variedad enorme de elementos, pero necesita dar un paso más para ser un referente como lo fue Style Boutique.
Resumen del análisis de Fashion Dreamer para Nintendo Switch
Fashion Dreamer
- Derrocha estilo por los cuatro costados.
- Hay una variedad de prendas, colores y patrones abrumadora.
- Gana mucho al jugar online.
- Carece de historia o de más alicientes más allá de crecer como “influencer”.
- El bucle de juego puede aburrirte en poco tiempo.
- La música es totalmente olvidable.