Análisis de Nintendo Switch 2

Nintendo Switch no solo revolucionó el mercado al apostar por un sistema híbrido, sino que demostró que los jugadores estaban dispuestos a romper con la forma en la que llevaban jugando toda su vida: o en portátil, o en sobremesa. Ahora, con Switch 2, Nintendo quiere llevar ese concepto aún más lejos, manteniendo la esencia modular pero planteando una evolución ambiciosa. La nueva consola de Nintendo amplía el espíritu versátil de Switch, pero introduce enormes cambios que llegan acompañados tanto de mejoras notables como de algunas decisiones cuestionables y que pueden no ser del agrado de todos. ¿Cuáles? Os lo contamos en nuestro análisis de Nintendo Switch 2.

Video Análisis de Nintendo Switch 2

La grandeza pesa

La primera impresión al sostener una Nintendo Switch 2 es la calidad general de sus materiales y la sensación al tacto, claramente superior a la del modelo original. Su acabado más sobrio y elegante transmite inmediatamente una sensación prémium, distanciándose mucho de la anterior consola, que podía sentirse como algo más parecido a un juguete.

Nintendo ha optado esta vez por aumentar considerablemente el tamaño, incorporando una pantalla de 7,9 pulgadas que afecta directamente al peso y dimensiones, tanto de la consola como de los Joy-Con 2. En este sentido, creemos que Nintendo se ha excedido un poco, haciendo que la consola resulte más pesada e incómoda para personas con manos pequeñas o incluso normales, alcanzando los 534 gramos de peso con los mandos acoplados y un tamaño de 27,2 x 16,6 centímetros. Esto son 100 gramos más y varios centímetros adicionales respecto al modelo OLED de Switch.

Jugar con los Joy-Con 2 en modo horizontal, donde la palanca de control ya no está tan cerca del borde en el mando derecho, se hace también un poco más incómodo.

La esencia modular característica de Switch se mantiene y mejora notablemente en esta nueva versión. Ahora los Joy-Con 2 se acoplan magnéticamente a la consola y al grip, un detalle ingenioso que además es extremadamente funcional y muy robusto.

El dock, que sirve para jugar en modo televisión, ha recibido un rediseño importante, con bordes redondeados que facilitan considerablemente la inserción y extracción del dispositivo, y añadiendo un ventilador interno necesario para mejorar la refrigeración. El dock cuenta con puertos USB tipo A en el lateral y un único USB-C para la alimentación en el interior. Aunque funcional, se echa en falta un segundo puerto USB-C adicional que facilite la conexión de accesorios como la cámara externa, que solo se puede enchufar directamente a la parte superior de Nintendo Switch 2.

Los Joy-Con 2 destacan positivamente por la calidad de construcción y su textura, que evita que se deslicen y mejora notablemente el agarre. Los imanes que emplea Nintendo para conectar los mandos son una muestra de ingenio que probablemente solo ellos podrían implementar con éxito. Sin embargo, el aumento general de tamaño y peso tiene sus contras, reduciendo notablemente la comodidad en modo portátil y alejando la consola del público infantil habitual de Nintendo. Esto hace evidente la necesidad futura de una versión más ligera y manejable, como podría ser una Nintendo Switch 2 Lite.

Unos Joy-Con más fiables, más robustos y más capaces

Nintendo ha decidido conservar las funciones básicas de los Joy-Con originales, pero mejorando la fiabilidad del control por movimiento y sacrificando la cámara infrarroja que probablemente pocos echarán de menos. A cambio, llegan mejoras notables como una vibración HD revisada, que es capaz de transmitir sensaciones de peso o retroceso con una precisión muy similar a la del mando de PlayStation 5. Aunque al estar los motores distribuidos de forma distinta, consigue mejores resultados en sensaciones de peso y algo menos efectivos en retrocesos específicos como los gatillos.

La gran novedad es la incorporación de un sensor óptico que permite utilizar cada Joy-Con 2 como ratón. Esta función es simplemente espectacular: funciona de manera excelente sobre distintas superficies, ya sea en mesas lisas, encima de ropa o sobre un sillón, con una precisión y respuesta sorprendentes. Consideramos esta innovación una de las mayores evoluciones introducidas por Nintendo desde la Switch original.

También se mantiene el lector NFC para figuras amiibo, como en los Joy-Con originales. No creemos que vaya a tener mucho más uso que hasta ahora, pero al menos cumple con estar presente como cabe esperar de la consola.

En nuestra experiencia previa con Nintendo Switch, los Joy-Con tenían problemas recurrentes de desconexión en ciertas situaciones difíciles, algo frustrante para muchos jugadores. Afortunadamente, en nuestras pruebas con los Joy-Con 2 no hemos experimentado ninguna desconexión, incluso en circunstancias similares a aquellas donde los mandos anteriores fallaban frecuentemente. Creemos que Nintendo ha solucionado por completo este molesto problema, mejorando significativamente la fiabilidad de la conexión.

El salto de potencia más grande de Nintendo

La unión entre NVIDIA y Nintendo ha resultado ser una de las colaboraciones más fructíferas de la historia del videojuego. Ambas compañías se complementan perfectamente, y en Nintendo Switch 2 han integrado un chip Tegra Ampere T239 con rendimiento que varía entre 1,72 y 3,09 Teraflops, además de ser compatible con la tecnología DLSS de NVIDIA. Con 12 GB de memoria RAM, una memoria UFS de 256 GB y núcleos dedicados al Ray Tracing y DLSS, la apuesta está claramente enfocada en proporcionar una potencia inteligente y eficiente más que en pura fuerza bruta.

La primera Nintendo Switch ya nos demostró que no es imprescindible tener la máxima potencia para conseguir grandes juegos y un gran éxito entre el público. Sin embargo, el salto que supone Nintendo Switch 2 es espectacular, alcanzando aproximadamente 10 veces más potencia que su predecesora, incluso sin contar con las mejoras aportadas por la inteligencia artificial. Esto se traduce en dos beneficios principales: una retrocompatibilidad sobresaliente que mejora visualmente todos los juegos de Nintendo Switch 1 y una calidad gráfica impresionante para una consola portátil, capaz de mostrar desde su estreno mundos abiertos enormes, detallados e hiperrealistas.

Nintendo Switch 2 es el salto más grande en innovación y potencia de todas las generaciones de Nintendo, teniendo en cuenta todas sus mejoras. Todo apunta a un futuro muy prometedor para la consola: si Nintendo y los desarrolladores ya hicieron auténticas maravillas con las limitaciones técnicas de la primera Switch, estamos deseando ver hasta dónde podrán llegar aprovechando toda la potencia, versatilidad y capacidad de optimización disponibles en Nintendo Switch 2.

Donde más se luce la consola es en modo televisor. La nueva pantalla incorporada de 1080p, que abandona el OLED visto en la última Switch a cambio de añadir HDR, es prácticamente un pozo sin fondo para la batería, obligando a Nintendo a limitar el rendimiento en modo portátil si no quieren que la consola salga ardiendo y se apague en menos que canta un gallo. Esto hará que la diferencia entre jugar en portátil y en televisión sea más notable que nunca.

Menos portátil, más versátil

Nintendo ha conseguido encontrar un cuidadoso equilibrio entre la potencia y la eficiencia junto a NVIDIA. Entre la sensación externa premium de la consola y la potencia que ofrece, estamos más cerca que nunca de lograr la utopía de una plataforma híbrida con un funcionamiento perfecto.

Nintendo Switch 2 destaca por su gran versatilidad, pudiendo jugar cómodamente tanto en modo portátil como conectado al televisor, mejorando la posibilidad de jugar en portátil con amigos por su enorme pantalla. Aunque esto se consigue a cambio de cierta incomodidad debida al mayor tamaño y peso, el concepto híbrido se ha hecho incluso más versátil, consolidándose definitivamente como una idea de oro para Nintendo.

La nueva forma del soporte trasero en forma de U no solo ha servido para reorganizar completamente la distribución de los componentes internos, sino que además añade nuevas posibilidades de uso al permitir colgar la consola en distintos lugares o apoyarla sobre superficies irregulares. Una mejora aparentemente menor pero que resulta sorprendentemente práctica.

La retrocompatibilidad con casi todos los juegos, mandos y accesorios de la Switch original hace de Nintendo Switch 2 una opción muy atractiva para los más de 150 millones de usuarios de Nintendo actuales. Es lógico pensar que tarde o temprano acabarán dando el salto a la nueva consola, sacando provecho a todo lo que ya tenían en la generación anterior.

Músculo, puertos y selfies

Cuanto más grande es una consola, normalmente mejora su gestión del calor. Esta es una de las principales razones, junto con su elevada potencia, por la que Nintendo Switch 2 resulta considerablemente más grande que su predecesora. Esto implica que ya no es tan portátil como la Nintendo Switch original. No es una consola que puedas guardar fácilmente en el bolsillo, ni siquiera desacoplando los Joy-Con. Aunque sigue siendo sencilla de transportar, requerirá una mochila o bolso para llevarla protegida adecuadamente. Es una de las mayores pegas que tenemos sobre el diseño de la Switch 2.

Entendemos que todo esto tiene una razón de ser: lograr el equilibrio entre máxima potencia, gestión del calor, duración de batería y tamaño y peso. Sin embargo, no deja de ser algo con lo que muchos jugadores podrían sentirse incómodos.

Conectividad y puertos

El Dock ahora es más grande, con puerto Ethernet para conexión a internet por cable y salida HDMI 4K HDR hasta 60 imágenes por segundo (hasta 120 imágenes por segundo a resolución HD o 2K), ofreciendo una calidad de imagen altísima. Su tamaño dificulta que encaje fácilmente en algunos muebles y requiriendo mucho espacio en la parte superior para insertar la consola y jugar en modo TV. Ahora, más que nunca, Nintendo debería haber considerado una opción para colocar la consola en posición horizontal.

Un nuevo puerto USB tipo C se sitúa en la parte superior de la consola, permitiendo cargarla desde arriba o desde abajo, y conectar accesorios como la cámara mientras juegas en la televisión. No obstante, sigue siendo evidente que el Dock necesitaría al menos un puerto USB-C adicional para evitar tener cables cruzando por encima de la consola.

La conectividad Bluetooth permite emparejar auriculares con baja latencia y mandos de terceros, mientras que los puertos jack incluidos tanto en la consola como en el nuevo Mando Pro admiten micrófonos y cascos con cable. Nintendo Switch 2 también introduce sonido envolvente 3D. Aunque no mejora los altavoces respecto a la versión OLED anterior, la nueva cavidad donde están insertados logra que el sonido sea notablemente mejor, y mediante software, es capaz de simular audio procedente de distintas direcciones. Esto se percibe, aunque realmente solo los audiófilos lo apreciarán claramente en sesiones normales de juego.

En pruebas de conexión a internet por cable, Nintendo Switch 2 alcanzó velocidades superiores a los 400 Mbps de descarga y más de 100 Mbps de subida, resultados ligeramente inferiores vía Wi-Fi, pero en cualquier caso muy superiores a lo visto anteriormente en Switch 1. Esta mejora resulta esencial considerando el tamaño creciente de muchos juegos actuales.

Una memoria necesaria en una consola más social

La memoria UFS interna de 256 GB puede quedarse corta rápidamente con juegos que llegan a superar los 70 GB, haciendo casi imprescindible el uso de almacenamiento externo para mantener una biblioteca amplia de juegos. En este punto, se agradece mucho la considerable mejora en las velocidades de descarga. Nintendo Switch 2 admite exclusivamente tarjetas microSD Express, ofreciendo velocidades comparables a las nuevas tarjetas de juego o al almacenamiento interno. Aunque más caras que las microSD estándar, creemos que esta decisión garantiza mejor rendimiento y mayor compatibilidad futura.

Nintendo Switch 2 incluye un apartado específico para el procesamiento de cámaras externas, permitiendo extraer fácilmente sujetos del fondo con buenos resultados. GameChat, otra gran novedad en su sistema operativo, funciona realmente bien para compartir pantalla y cámara con amigos mientras juegas. Aunque al principio sorprende un poco la baja tasa de refresco en la retransmisión, no está diseñado para calidad visual, sino para compartir y sentirse acompañado jugando, algo que logra perfectamente.

La interfaz de Nintendo Switch 2 permanece prácticamente idéntica a la original: visual y sencilla, aunque poco adecuada para gestionar bibliotecas extensas de juegos. Los jugadores que buscan entornos más elaborados con logros, temas o funciones online avanzadas podrían decepcionarse, ya que Nintendo no ha evolucionado significativamente en estos aspectos, mostrando poca ambición en este sentido, especialmente considerando la capacidad del nuevo hardware.

La grandeza tiene limitaciones

La pérdida, cada vez más evidente, de portabilidad no beneficia en absoluto a Switch 2, que se siente como una bestia en las manos en lugar de una consola pequeña y manejable. Ha evolucionado en casi todos los aspectos, sí, pero a cambio ha incrementado considerablemente su peso y tamaño, perjudicando notablemente la ergonomía y comodidad durante el juego portátil.

La duración estimada de la batería según Nintendo es de entre 2 y 6 horas, pero en nuestras pruebas con juegos exigentes como Mario Kart World, con brillo máximo y sin ajuste automático, hemos visto cómo la batería apenas alcanzaba las dos horas. Es posible mejorar ligeramente esta autonomía ajustando el brillo y el volumen, pero la duración limitada de la batería es claramente otro sacrificio que hacemos a cambio de esta potencia y calidad.

Además, la consola tiende a calentarse considerablemente en modo Dock cuando ejecuta juegos especialmente exigentes. El ventilador incorporado en el Dock resulta imprescindible para disipar mejor el calor acumulado, ya que hemos medido temperaturas máximas de unos 55 grados en la parte trasera exterior de la consola. Aunque estas temperaturas no deberían afectar directamente a componentes críticos como CPU o RAM, podrían influir negativamente en la vida útil de la batería a largo plazo, a pesar de que internamente, la distribución del sistema está optimizada para que la batería, y el resto de componentes, sufran lo menos posible. Tampoco resulta especialmente agradable coger la consola recién sacada del Dock, ya que da la impresión de estar sacando pan caliente del horno.

Switch 2: una consola sobresaliente a las puertas de la excelencia

Nintendo Switch 2 lleva aún más lejos el revolucionario concepto híbrido que introdujo la Switch original, potenciando su flexibilidad como consola doméstica y portátil. Indudablemente es un logro tecnológico, con capacidad para mostrar gráficos impresionantes y características innovadoras como el DLSS y Ray Tracing. Sin embargo, esta potencia implica compromisos inevitables: el aumento considerable de tamaño y peso, la reducción en comodidad portátil, una batería más limitada y ciertos problemas de calentamiento que, esperamos, no dañen los componentes a largo plazo.

Construida con una excelente calidad y llena de ideas brillantes como los Joy-Con 2 magnéticos y su modo ratón, Nintendo Switch 2 no logra superar completamente las limitaciones esperables de su diseño híbrido. Aunque su hardware ofrece un salto sobresaliente en innovación, rendimiento gráfico y versatilidad, hace sacrificios importantes en portabilidad y autonomía, dejando a los jugadores con un “más y mejor” respecto a la primera Switch y la pregunta en el aire de si realmente este es el equilibrio potencia-portabilidad que debe guiar el futuro de las consolas híbridas.