El invierno puede ser traicionero. Te explicamos cómo evitar el problema que puede romper tu Nintendo Switch por el frío: la condensación.
Todos los aparatos electrónicos son sensibles a los cambios de temperatura. Durante el verano, hay que tener cautela al jugar con tu Switch, ya que las altas temperaturas pueden afectar a sus componentes en caso de sobrecalentamiento. Durante el invierno, también hay ciertos peligros a considerar. Nintendo ha emitido una advertencia para informar a los jugadores de un problema que es capaz de estropear cualquier Switch cuando hace mucho frío: la condensación.
Lo ha hecho a través de la cuenta oficial de soporte que tiene en Twitter. En ella, ha avisado de la posibilidad de que la condensación genere gotas de agua dentro de la consola, o sobre la propia pantalla. Algo que sucede, principalmente, cuando hay cambios bruscos de temperatura, debido a la humedad acumulada.
Es posible que se genere condensación en la consola si la temperatura de la zona en la que se encuentra cambia rápidamente.
Si esto sucede, apaga la consola y déjala en una habitación cálida hasta que se sequen las gotas de agua.
Cabe recalcar que la compañía indica expresamente que la solución al problema de la condensación por frío/calor en Switch se evita apagando la consola, no dejándola en reposo. Si ves que se forman gotas de agua en tu consola, solo tienes que hacer esto para solucionarlo:
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