Por total sorpresa, aunque se podía vaticinar viendo cómo Xbox y PlayStation ya habían dado el paso, Nintendo ha anunciado que dejará de dar soporte a la función de compartir imágenes y vídeos desde Nintendo Switch directamente en X (Twitter). La integración de la red social en la consola de Nintendo dejará de funcionar a partir de junio.

A través de sus perfiles sociales en dicha red social, la propia Nintendo ha informado a los usuarios del cierre de esta función. “A partir del 10 de junio de 2024, no estará disponible la opción de publicar capturas de pantalla y vídeos a X (Twitter anteriormente) desde el álbum de la consola Nintendo Switch”, revelaba la cuenta de Nintendo Latinoamérica durante la pasada madrugada. Asimismo, tampoco será posible enviar peticiones de amistad a usuarios de X (Twitter) desde la consola.

Por su parte, la cuenta oficial de X Gaming, rama de la red social dedicada a los videojuegos, ha respondido al comunicado de Nintendo, recalcando que “estamos centrados en mejorar y apoyar las funciones relacionadas con el gaming” y explicando que los jugadores de Switch tendrán que usar la función de compartir contenido multimedia a través de su teléfono móvil.

Nuestra alianza con Nintendo sigue siendo fuerte, y estamos trabajando juntos para asegurar una transición suave para todos los usuarios. Seguiremos colaborando con socios para brindar nuevas y emocionantes experiencias a nuestra comunidad global de jugadores.

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¿Por qué Nintendo Switch ha cortado todas las funciones vinculadas a X (Twitter)?

La adquisición de la red social por parte de Elon Musk ha traído numerosos cambios a nivel de uso y experiencia de usuario, aunque uno de los cambios más importantes para las empresas es el coste de la API para integrar X (Twitter) en sus sistemas. Funciones como la de compartir imágenes directamente, la vinculación de perfiles o cualquiera que requiera una conexión directa entre el software de una compañía y la red social para su integración, suponen un precio bastante elevado.

De hecho, el precio de usar dicha API oscila entre los 42.000 $ y los 210.000 $ mensuales para las empresas, con un precio de 5.000 $ para startups que están comenzando. Son unas cifras que suponen una gran brecha, y uno de los grandes alicientes para que empresas como Microsoft, Sony o la propia Nintendo hayan optado por cortar.

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