Menu button
Search button
Back button
Análisis – Xenoblade Chronicles Definitive Edition (Nintendo Switch)
Inicio>Análisis – Xenoblade Chronicles Definitive Edition (Nintendo Switch)

Análisis – Xenoblade Chronicles Definitive Edition (Nintendo Switch)

Nintendo Switch se está convirtiendo en todo un paraíso para los RPG japoneses. A lo largo de sus tres años de vida hasta el momento, nos ha traído verdaderas joyas que mezclan la innovación con un carácter tradicional inconfundible, tanto por parte de Nintendo como de Square-Enix. A MonolithSoft se le ha encargado poner al…

Nintendo Switch se está convirtiendo en todo un paraíso para los RPG japoneses. A lo largo de sus tres años de vida hasta el momento, nos ha traído verdaderas joyas que mezclan la innovación con un carácter tradicional inconfundible, tanto por parte de Nintendo como de Square-Enix. A MonolithSoft se le ha encargado poner al día uno de sus clásicos, Xenoblade Chronicles en Nintendo Switch, y aquí os traemos su análisis.


Sabemos que es la cuarta vez que este juego llega a una consola de Nintendo, pero por si todavía no lo habéis jugado, ahora podréis hacerlo mejor que nunca en Switch.

Presentación

Hace mucho, mucho tiempo, Bionis y Mekonis luchaban en una interminable pelea, que terminó con ambos sumidos en un letargo eterno. Sus cuerpos sirvieron para que los humas y los mekon, tuvieran un suelo firme sobre el que poder vivir, mientras estos seguían su lucha.

Este universo extraño da pie al mundo de Xenoblade Chronicles, la primera entrega de esta saga que tiene a Shulk como protagonista. Este joven lleva desde su infancia en Colonia 9, y se le ha encargado la misión de estudiar la espada Monado, capaz de dañar seriamente a los Mekon.


Es una historia compleja, y se vuelve aún más según avanza la trama, así que tenéis que con la mente muy abierta y la cabeza bien amueblada para llegar a entenderla y colocar cada cosa en su lugar.

Shulk no estará solo, y le rodearán un montón de personajes variopintos, bien construidos, aunque no todos con la misma importancia y evolución, dejando a algunos protagonistas un poco a su suerte.

Consideramos imprescindible que la historia nos enganche, ya que es la motivación para no dejar atrás el juego. Esta edición definitiva incluye una extensión de la historia principal, que ocurre un año después del final de lo acontecido en la trama que ya conocíamos. Este extra se llama Futuros Conectados, y no podemos hablar de ella sin entrar en spoilers, así que os diremos que nos ha parecido entretenida, y que los fans que querían más sobre el mundo de Shulk la disfrutarán mucho.

Apartado Técnico

Tenemos antecedentes irregulares en lo respectivo al apartado técnico de los juegos de MonolithSoft. Han demostrado que se han hecho sobradamente con el hardware de Nintendo Switch, pero por algún motivo la saga Xenoblade palidece respecto a otros juegos en los que ellos mismos han colaborado.


Nuestra pregunta era si esta remasterización del primer Xenoblade, serviría para dar un paso adelante y erradicar estos pequeños fallos, y parece que así ha sido. Hemos visto una progresión correcta en varios sentidos: el primero, y el mejor, son las animaciones faciales de los personajes. No destacan especialmente en el catálogo de Switch, pero si que han mejorado respecto a Xenoblade Chronicles 2 y X.

Todas las escenas están generadas con el motor del juego, pero la calidad entre ellas no es ni mucho menos la misma. Se nota demasiado cuándo se ha puesto empeño en que los movimientos corporales sean naturales, y cuando no. Al menos se ha aumentado el dinamismo con planos de cámara móviles, y por supuesto más detalle y mejores modelados de los personajes, enemigos y entorno.

El juego corre a 30 imágenes por segundo, cayendo en algún momento de forma leve. Entendemos que se ha dado prioridad a esto, manteniendo una tasa de imágenes por segundo aceptable para un juego de estas características. Tampoco es que se vea muy nítido, no alcanzando los 1080p en modo televisor, y por debajo de los 720p en modo portátil. Esto hace que, en ocasiones, percibamos borrosidad en la imagen.

La parte buena de esto es que Xenoblade nos ofrece entornos enormes que explorar. Un gran mundo abierto bastante vivo, con una fauna y flora que pone en evidencia el buen gusto artístico que tenía esta entrega. El paso a Nintendo Switch ha servido para que la idea original se represente de forma más fiel en el papel, aunque de forma un tanto vaga, con esfuerzo repartido de forma desigual entre personajes, NPCs, o crituaras del mundo.


Consideradlo una puesta al día, que también ha servido para dar una vuelta al apartado sonoro. La música de Xenoblade Chronicles Definitive Edition ha sido reeditada, pudiendo seleccionar desde el menú si queremos la banda sonora clásica, o la nueva que se estrena en esta versión.

La saga Xenoblade se luce con sus bandas sonoras, y esta primera entrega tenía algunas composiciones consideradas “top” dentro de Nintendo.

Por suerte podremos elegir entre voces en inglés y japonés. Ambas tienen una gran calidad, pero encajan mucho mejor con las animaciones faciales las voces niponas.

Jugabilidad

Los fans de los JRPG están de enhorabuena con Nintendo Switch. No solo podemos jugar interminables juegos donde queramos gracias a su modo portátil, si no que además, los títulos que llegan de este género son realmente buenos.


Xenoblade nos cuenta una historia de ciencia ficción, donde tendremos que recorrer a los titanes Bionis y Mekonis para descubrir la verdad sobre la espada Monado. 

Puede ser complicado hacerse con el manejo del sistema de combate de la saga Xenoblade, sobre todo porque en cada juego es ligeramente distinto. Siendo esta la base, no estamos hablando ni de lejos del más sencillo.

Se trata de un RPG con combates en tiempo real, y los golpes de cada personaje tendrán un timming determinado, aunque en cualquier momento podremos utilizar ataques asíncronos llamados “artes”. Tendremos que plantear estrategias para la manera en la que atacan los enemigos, potenciando a nuestros personajes o lanzando fuertes ofensivas.

Es complicado, pero a grandes rasgos así es el sistema de combate de Xenoblade, uno que en cierta forma es adictivo, y que cuanto más se avanza en la aventura más te gusta. Pero los combates solo son una pequeña parte del juego. 


Podremos movernos libremente por las diferentes partes del mundo, sin tiempos de carga en cada una de las gigantescas zonas disponibles. En las ciudades podremos comprar objetos o armas y armaduras que nos servirán para rendir mejor en las batallas, además de poder hablar con NPCs, que nos ofrecerán un sinfín de misiones secundarias, no muy interesantes, pero sí entretenidas. Y lo más importante, normalmente bien recompensadas y gratificantes.

Los personajes subirán de nivel al ganar experiencia, y así se harán más fuertes, aunque también es posible mejorar cada una de las artes de forma independiente. En el árbol de poderes también podremos obtener mejoras para los personajes de forma individual, eligiendo un rasgo u otro. La equipación de cada parte del cuerpo hará variar sus estadísticas, pudiendo añadirles gemas para potenciarlas. También tenemos una parte de coleccionables, para que los jugadores que quieran conseguir todos los objetos tengan un lugar donde ponerlos y sean recompensados.

Con todo esto queremos llegar a la conclusión de que hay muchas formas de jugar Xenoblade Chronicles. Tenemos muchos caminos por los que llegar al final, muchas formas de hacer las cosas, y eso en un RPG es algo que se agradece.

No todos los jugadores podrían enfrentarse a Xenoblade debido a su dificultad, y es por esto por lo que el equipo de desarrollo ha añadido un modo relajado al juego, donde los enemigos no son tan fuertes y es más fácil ganar experiencia. Para los que quieren más control, se ha añadido un modo experto, para gestionar de forma manual e indivi dual los puntos de experiencia ganados en combate. 


Xenoblade es un RPG denso y duradero, con una enorme cantidad de escenas y un vasto mundo por recorrer, y podremos tardar en completar la historia principal entre 60 y 70 horas, dependiendo del ritmo y la dificultad en que juguemos. Por otro lado, el contenido añadido Futuros Conectados puede superar incluso las 20 horas.

Extras

La edición definitiva de la historia de Shulk incluye una extensión de la original, situada cronológicamente un año después del final de Xenoblade. No cambia mucho la forma en la que se juega, como sí hizo el contenido descargable de Xenoblade Chronicles 2, y se centra más en expandir el universo de Shulk, y explicar y desarrollar un poco más la historia de la saga.

Creemos que, más allá de la versión de New Nintendo 3DS, Xenoblade Chronicles en Nintendo Switch es la mejor forma de disfrutar del juego. No tanto por el enorme salto gráfico respecto a la versión original, si no por el equilibrio conseguido entre portabilidad y buen aspecto de la versión.

Eso si, el juego sufre bastante en su paso a formato portátil. La resolución baja considerablemente y vemos los entornos y personajes bastante borrosos. Un precio a pagar por disfrutar de una epopeya gigante en la palma de la mano.


Conclusión

MonolithSoft y Nintendo ponen al día la aventura de Shulk y la historia de la Monado, dedicada a aquellos que se quedaron con más ganas de RPGs tras completar Xenoblade 2, y que no pudieron disfrutar de la primera parte. También creemos que es una oportunidad estupenda para revivir una historia inolvidable, con un extra que los fans de la primera entrega sabrán apreciar.

Siempre nos ha gustado cómo Xenoblade hace que su sistema de combate te enganche, dándote la libertad que no te dan los JRPG tradicionales, y marcando su propio estilo. Aquí además está envuelto en una historia genial, adulta y compleja, quizá demasiado, pero sin problemas en este aspecto. Un poco lenta, por decir algo negativo.

Aunque técnicamente hemos visto evolución en algunos puntos respecto Xenoblade 2, sabemos muy bien cuándo el equipo ha puesto ganas en que el juego luzca bien y cuando no. Las animaciones, tanto faciales como corporales, palidecen demasiado en determinadas ocasiones.

Vemos la resolución demasiado baja, lo que repercute en tener una visión borrosa, especialmente en formato portátil. Injustificada, por otro lado, al no ser un juego totalmente nuevo que explote el hardware de Switch, ni haber incluido opciones gráficas avanzadas. Por decir algo bueno del apartado técnico, los modelos de los protagonistas, y tras dos revisiones, han quedado por fin genial, tal y como nos habría gustado que fueran desde un inicio.

Quedamos a la espera de una previsible tercera entrega, que ayude a dar aún más forma y cohesión a todo el universo de Xenoblade. Mientras tanto, Switch se hace con otro estupendo y colosal RPG.

Nota: 86


Tenéis más información sobre el juego y podéis adquirirlo en formato digital en su web oficial.

Redactado por:

Álvaro Rodríguez Estruel
administrator de Nintendúo
Voz y Mii en Nintendúo. Ingeniero electrónico. Gamer, pianista electrónico, fotógrafo en prácticas, inkling y héroe del tiempo.