Los gastos se salen de lo normal, Nintendo podría estar planeando el lanzamiento de una nueva consola o revisión de Switch pronto. ¿O no?
Durante la pasada madrugada, en horario español, se ha celebrado la última junta anual de accionistas de Nintendo. Una ocasión que se repite verano a verano en la que accionistas y directiva se reúnen para repasar la trayectoria de la empresa y vislumbrar algunos planes de futuro, y que esta vez parece estar cubierta por la sombra de un nuevo modelo de Nintendo Switch, o una nueva consola.
Los inversores no han dudado en preguntar, porque en junio de 2022, el gasto de Nintendo en suministros y materias primas ha sido de 66.517 millones de yenes. ¿Una cifra lógica? Comparando con las cifras de años anteriores, no:
El caso más cercano se dio en junio de 2019, cuando la compañía se estaba preparando para la fabricación de Nintendo Switch Lite y la revisión del modelo estándar de Nintendo Switch con el chip Mariko. De hecho, se puede ver que la cantidad de bienes en fabricación (hardware principalmente) rozaba los 800 millones de yenes por aquel entonces, con 3.175 millones en bienes ya fabricados. Según los datos de Nintendo en junio de 2022, solo hay 69 millones de yenes en bienes en fabricación y casi 2.800 millones ya fabricados.
El motivo de esto puede ser por un encarecimiento de la materia prima, algo lógico debido a la inflación que se está viendo en muchos países y también por los problemas de distribución y escasez de recursos para semiconductores. Sin embargo, el volumen de compra es anómalo, se sale de todo lo registrado hasta ahora e indica que la compañía planea empezar a fabricar un gran volumen de hardware pronto y, probablemente, el uso de nuevos materiales o de materiales más caros.
La situación es extraña, sobre todo porque, a pesar del enorme gasto, las previsiones de ventas de Switch para este año están por debajo de las de años anteriores. No encaja la inversión con la previsión actual, salvo que se planee el lanzamiento de un nuevo hardware que justifique unos componentes más caros y cuya producción empiece en breve.
Con un gasto tan considerable, era de esperar que los inversores de la compañía preguntaran. En la reciente reunión anual que ha tenido lugar en la compañía, uno de los accionistas ha preguntado cuál ha sido el motivo de invertir más de 66.000 millones de yenes en materiales y recursos. Shuntaro Furukawa, presidente de Nintendo, ha respondido:
Hay dos razones principales. En la situación de escasez de oferta y demanda de componentes relacionados con los semiconductores, es necesario prepararse para la producción asegurando los inventarios de materias primas y componentes antes que en anteriores ocasiones.
La primera razón es que tenemos más existencias que antes. La segunda razón es que hubo un cambio en el tratamiento contable con la adopción de la nueva norma de reconocimiento de ingresos, y el impacto de este cambio es un aumento de 36.500 millones de yenes. En el proceso de producción de nuestro hardware, vendemos las piezas que adquirimos a los ensambladores a cambio de una tarifa, y luego compramos los productos ensamblados.
Con la nueva normativa, la empresa ya no puede reconocer la extinción de existencias (en la hoja de balances) cuando se suministran piezas a los ensambladores contratados a cambio de esa tarifa, ya que la empresa está obligada a recomprar las piezas.
En consecuencia, en lugar de reconocer la extinción de existencia, la Compañía ha cambiado el tratamiento contable para reconocer un “pasivo por transacción para la que se suministraron piezas a cambio de un valor”, como una obligación de recompra de piezas al proveedor, lo que dio lugar a un aumento de las existencias en el balance.
Shuntaro Furukawa, presidente de Nintendo
