Por qué los juegos de Nintendo no bajan de precio
¿Te has preguntado alguna vez por qué Nintendo no baja sus juegos de precio? La respuesta la dio la propia compañía hace casi 20 años.
Seguro que algún amigo, conocido, familiar o incluso usuario con el que te has cruzado en redes, o incluso tú mismo, ha soltado alguna vez la frase: “¿Por qué Nintendo no baja el precio de sus juegos nunca?”. Una pregunta común, con una respuesta que lleva años en nuestras narices.
Dejando a un lado el sello Nintendo Selects que se extinguió con Wii U y 3DS, como el juego online gratuito de Nintendo, todo el que alguna vez haya comprado juegos de Switch sabe que aquellos desarrollados y publicados por Nintendo suelen mantener su precio original de forma perenne. Tenemos casos que lo demuestran fácilmente, como Super Mario Odyssey, The Legend of Zelda: Breath of the Wild, Super Smash Bros Ultimate o incluso Mario Kart 8 Deluxe.
Salvo ofertas eventuales, como la reciente promoción “Destacados”, la Gran N mantiene una filosofía que explicó Satoru Iwata cuando estaba al frente de la compañía. Lo decía ya en 2006, y lo repetía en una entrevista recogida en el libro Iwata Pregunta:
Después de que una pieza de hardware sale al mercado, el precio se va reduciendo gradualmente durante unos cinco años hasta que la demanda se agota. Pero, si el ciclo de la demanda nunca falla, ¿por qué molestarse en reducir el precio?
Creo que si se reduce el precio con el tiempo, el fabricante está condicionando al cliente a esperar una oferta mejor, algo que siempre me ha parecido un planteamiento un tanto extraño.
Satoru Iwata, antiguo presidente de Nintendo
Es algo que seguro que muchos habéis vivido alguna vez. Servidor ha perdido la cuenta de cuantas y cuantas veces ha escuchado o leído eso de “me espero a que esté en oferta” con alguna que otra third party que todos conocemos. Y es una estrategia lógica, por supuesto, pero también una con la que la casa de Mario lleva tiempo combatiendo con su filosofía de precios.
¿Una filosofía igualitaria para los early adopters?
Y es que las ofertas y las bajadas de precio permanentes, aunque interesantes, son peligrosas cuando llegan al poco tiempo de un lanzamiento. En este sector, la mayoría de veces el grueso de ventas de un juego se condensa en sus primeras semanas, manteniendo con el tiempo unas cifras residuales que, salvo contadas excepciones, no suelen alargar considerablemente su ciclo de venta.
El problema de este planteamiento es que, cuando un juego no logra llegar a las ventas deseadas, es carne de oferta temprana. El propio Iwata explicaba que esto puede ser un problema por dos razones. La primera, como señalaba hace 18 años, es que “si el precio de venta sugerido de cualquier software se baja en 6 o 9 meses, los consumidores aprenderán de ese ciclo y esperarán al descuento“. La segunda son los early adopters, quienes compran juegos de lanzamiento y luego ven cómo bajan de precio al poco tiempo, con la consecuente cara de póker:
Siempre he querido evitar la situación en la que los primeros en dar un paso al frente y apoyarnos se sientan castigados por pagar el precio máximo, refunfuñando: ‘Supongo que este es el precio que tengo que pagar por ser el primero de la fila’.
Satoru Iwata, antiguo presidente de Nintendo
La calidad no caduca
Hay una tercera razón que muchas veces no se tiene en cuenta, y que va ligada al valor del juego. Nintendo es conocida por su apuesta por la calidad y por mimar hasta el último detalle sus títulos, hasta el punto de atribuírsele una célebre frase sobre retrasos a Miyamoto, uno de sus creativos más prominentes, sin haberla dicho jamás. Algo que les hace mantenerse férreos a la hora de poner precio a un juego.
Para la compañía, el precio es una cantidad que debe reflejar cuatro aspectos: volumen, tema, contenidos y tiempo invertido en el desarrollo. En base a eso, fija una cifra que considera inamovible. Y es que, si un juego es bueno hoy, debería ser igual de bueno dentro de cinco años. Para La Gran N, la calidad no tiene caducidad. Son incompatibles.
Sí es cierto, como decíamos, que muchos de los juegos first-party de Nintendo, sobre todo en Switch, han protagonizado algunas de las campañas de ofertas de la compañía. No obstante, hablamos de descuentos máximos de un 30% en juegos con años a sus espaldas y durante tiempo reducido, no de “chollazos” a mitad de precio o incluso más baratos.
Sea o no una práctica correcta, sin duda es la que la compañía lleva manteniendo durante años, y la que mejor les funciona. Solo hay que ver cuáles son los juegos más vendidos de Switch y el precio que tienen a día de hoy. Que Mario Kart 8 Deluxe cueste lo mismo ahora que cuando salió, no le ha impedido superar los 60 millones de copias; y que Smash Bros Ultimate sea incluso más caro que este, tampoco le ha frenado para superar los 33 millones. No están rebajados, algunos incluso cuestan algo más de lo habitual para Nintendo y, aún así, su top roza los 200 millones de unidades vendidas en conjunto.
¿Se mantendrá esta mentalidad en la compañía de cara al futuro? No hace falta sacar una bola de cristal para vaticinar que no va a variar ni un ápice. Puede que los juegos de la sucesora de Switch sean más caros, pero seguirán manteniéndose igual y sin rebajas a corto plazo. A fin de cuentas, siguen navegando en su propio océano azul.
Y tú, ahora que sabes por qué Nintendo no baja sus juegos de precio desde hace años, ¿crees que es una razón correcta?