Lo más sorprendente de Zelda Tears of the Kingdom es algo de lo que nadie está hablando
Internet está poniendo a prueba el nuevo Zelda Tears of the Kingdom, y lo más sorprendente de todo es que nadie se ha percatado de algo.
Lleva muy poco tiempo entre nosotros y, aun así, la comunidad ya está poniendo a prueba a fondo el nuevo Zelda con máquinas de torturar Kologs e incluso creaciones loquísimas. Aun así, eso no es lo realmente sorprendente de Zelda Tears of the Kingdom, es algo que podemos ver en la mayoría de lanzamientos recientes y que, aquí, brilla por su ausencia.
Y es que la secuela de Zelda Breath of the Wild carga sobre su motor de físicas un peso enorme. Tanto, que cabría esperar que surgieran más bugs o glitches en el juego que dieran que hablar. Pero todo lo contrario, nadie se está topando con ellos a pesar de que se están haciendo auténticas locuras con las creaciones que se pueden hacer gracias a las nuevas habilidades de Link.
Esta web reúne y explica las mejores construcciones de Zelda Tears of the Kingdom
El único caso que se ha dado hasta ahora es un glitch que sirve para clonar armas o escudos en Tears of the Kingdom. Pero, dejando eso a un lado, no hay nada más. A pesar de que son muchos los objetos que interactúan entre sí y las situaciones que ponen a prueba las físicas y el motor del título, no se ha dado ningún fallo. Todo lo contrario, el entorno se ha convertido en un enorme patio de recreo donde estamos viendo hacerse realidad las máquinas y construcciones más absurdas.
Puede que la clave esté tras su parche de lanzamiento, o tras un motor que lleva años siendo refinado al máximo. Sea como fuere, nadie está hablando de fallos de colisiones, objetos que se comportan raro o que se atraviesan en el nuevo Zelda Tears of the Kingdom, y eso sí que es sorprendente. A pesar de que se está llevando al límite, no se ha “roto”.
¿Logrará alguien hacerlo o seguirá mostrando su robustez? Sin duda, todos estos años han servido no solo para crear una obra maestra, sino para cuidarla y mimarla para que todo esté perfectamente pulido… Hasta que alguien haga de las suyas.