La nueva Nintendo Switch 2 tendría una pantalla LCD
Sharp ha formado parte del desarrollo de una nueva consola y da a entender que trabaja en la pantalla LCD de la sucesora de Nintendo Switch.
Tras la última reunión de inversores, el debate y las especulaciones sobre la nueva consola de Nintendo se han elevado. La compañía ha reconocido que la sucesora de Switch no se anunciará de la misma forma, pero también ha dejado ver que habrá que esperar bastante hasta conocerla. Ahora, Sharp ha dejado escapar su posible implicación en la pantalla de la supuesta Nintendo Switch 2.
El fabricante, que ya colaboró con Nintendo en el pasado, ha revelado en su último informe financiero que ha preparado las líneas de producción piloto de paneles LCD para una nueva consola de cara a este nuevo año fiscal. El texto en cuestión ha desaparecido al poco tiempo, ya que Sharp ha tardado poco en retirar la mención, posiblemente por el aviso de los responsables de dicha consola.
Aunque no concreta a qué plataforma se refiere, desde Bloomberg señalan que el candidato más afín es Nintendo. Nikkei recientemente adelantaba que el desarrollo del nuevo hardware progresa bien y, dada la relación entre Nintendo y Sharp, no sería extraño que ambas estuvieran colaborando. De hecho, representantes de Sharp han aclarado que su implicación en el nuevo dispositivo ha ido más allá y que “hemos estado involucrados en su fase de I+D“.
Es posible que se trate de otro dispositivo. En las últimas semanas se han acrecentado los rumores de una especie de consola portátil de Sony que sigue el modelo de Wii U, y el uso de este tipo de panel encajaría con ella. No obstante, dado que ya ha trabajado con los de Kioto en el pasado, sobre todo en 3DS, lo que más encaja en este contexto es que Sharp esté al cargo de la pantalla LCD de la nueva consola de Nintendo, la sucesora de Switch bautizada por internet como Switch 2.
Algo que, además, dispara las dudas por otra parte. Dada la existencia del modelo OLED de Switch, dar un paso atrás y optar por un panel LCD supone una pérdida de calidad que, posiblemente, se justifique con un abaratamiento de costes para ajustar mejor el precio de la plataforma. Tarde o temprano, lo veremos.